¿Cómo se determina el rumbo con la brújula?
El determinar el rumbo con una brújula es una tarea bastante sencilla una vez que se comprende cómo funciona este instrumento de navegación.
La brújula es un dispositivo simple pero efectivo que utiliza un imán en su interior para orientarse hacia el polo norte magnético de la Tierra. Esta aguja magnética indica siempre la dirección norte-sur, lo que significa que se puede utilizar para establecer cualquier rumbo.
Para determinar el rumbo con una brújula, primero debes asegurarte de que esté nivelada. Luego, debes sostenerla firmemente en tu mano sin bloquear la vista de la aguja. Asegúrate de que no haya objetos metálicos cerca que puedan influir en su lectura.
Ahora, apunta la flecha de la brújula hacia adelante y gira tu cuerpo hasta que la aguja magnética quede alineada con la línea roja de referencia en la carátula. En ese momento, la brújula habrá determinado el norte magnético, y podrás leer el rumbo en la escala que rodea la carátula. Por ejemplo, si la aguja apunta al este, estarás mirando hacia el este y tu rumbo será de 90 grados.
Es importante recordar que la brújula siempre apunta al polo norte magnético, no al polo norte geográfico. Estos dos polos están ligeramente desplazados, por lo que debes tener en cuenta la declinación magnética en tu ubicación para obtener un rumbo preciso.
En resumen, para determinar el rumbo con una brújula, necesitas nivelarla, sostenerla firmemente y girar tu cuerpo hasta alinear la aguja con la línea roja en la carátula. Luego, podrás leer el rumbo en la escala y ajustarlo según la declinación magnética si es necesario.